Nadia, con la ayuda voluntaria del doctor Oscar Fontalvo y su equipo médico, logró organizar y costear el traslado de la pequeña Tania a Cartagena de Indias para que pudiera someterse a su primera operación.
Esta intervención fue crucial para mejorar la capacidad respiratoria de la niña, brindándole así una mejor calidad de vida y esperanza para el futuro.